viernes, 27 de junio de 2014

LEGITIMIZACIÓN DEL LIDERAZGO


El Liderazgo se suele asociar a Eficacia. Podemos afirmar que el liderazgo es una necesidad en el funcionamiento eficaz de las organizaciones. En la actualidad, en un mundo en constante mutación, una organización debe tener un papel dinámico interno, que es asumido y personificado por el líder.

 

A medida que las organizaciones crecen y sienten la necesidad de cambiar su estructura actual para una estructura que se revele más adecuada a sus exigencias, es necesaria la existencia de una mano (visible), de un apoyo que ayude tanto a la implementación de nuevas reglas y relaciones, como a su posterior coordinación.

 

En una organización el componente humano es primordial y se considera una ventaja competitiva o activo intangible.

 

Pero el líder nunca debe ser impuesto en este entorno. El líder surge y los demás lo legitiman como tal. Digamos que existe una percepción que identifica el jefe con el líder, es decir, el poder con el líder. Pero realmente, líder es aquél que es legitimado por los demás. Si no hay legitimación, no hay auténticos seguidores de líder. Quizás los haya pero no será por propia voluntad, sino que lo harán por jerarquía o por autoridad.

                    

Llegados aquí, podemos decir que hay cuatro implicaciones importantes en la definición de Liderazgo, que son:

 

§  Liderazgo envuelve otras personas - empleados y seguidores - personas con quien trabajar, las calidades del liderazgo de un gestor se tornarían irrelevantes y no necesarias.

 

§  Liderazgo abarca una distribución  desigual de poder (diferencial de poder), cuyas fuentes pueden ser: poder coercitivo, poder legítimo, poder basado en las remuneraciones, poder basado en el carisma y poder de perito.

 

§  Liderazgo incluye la habilidad de usar las diferentes formas de poder para influenciar sus seguidores.

 

§  Liderazgo abarca valores, pues así los seguidores podrían tomar decisiones inteligentes y sensatas cuando llegara el momento en que el líder delegue en ellos.

lunes, 23 de junio de 2014

EFICACIA DEL LÍDER


Podriamos decir que la Teoría de los Rasgos es la que menos nos habla de la Eficacia del Liderazgo, ya que parte del presupuesto que ser líder es el resultado de características personales. Este presupuesto conduce, naturalmente, a la aceptación casi automática de  la excelencia de los líderes y de su eficacia intragrupo. Es decir, que por el hecho de ser líder, ya eres eficaz. Y por tanto, cualquier fracaso es  interpretado no como síntomas de ineficacia del líder, sino como obstáculos insuperables o como fallos del grupo dirigido.

 

Los éxitos y fracasos del líder, son vistos como problemas circunstanciales, puntuales, que afectan el bienestar y el futuro del equipo, pero no afectan directamente el liderazgo.

 

Las teorías del comportamiento interaccional en grupo introducen de manera explícita la cuestión de la eficacia. Al descubrir dos categorías de comportamientos  en el proceso de liderazgo – la iniciación a la estructura (u orientación de tareas), y a la consideración (u orientación de relaciones interpersonales) – concebirán naturalmente la idea de la combinación más eficaz de las dos.  Así, las diversas combinaciones de estas variables constituirán  diversos estilos de liderazgo: de esos estilos, uno sería el eficaz por la conjugación de los comportamientos relacionales y de tarea. Si un líder consiguiese conjugar en  su comportamiento grupal la respuesta a los desafíos de la tarea y la necesaria atención a los sentimientos de las personas, su liderazgo sería eficaz.

 

Para los autores que se integran en las concepciones situacionales o contingentes del liderazgo, la eficacia es definida con relación al interior del grupo, como si todas las situaciones fuesen abstractas, como si todos  los grupos fuesen unidades uniformes, sin la enorme variedad de personas que en la realidad los constituyen.

 

Para los autores situacionales y contextualistas, la eficacia de un líder es una conjugación de factores personales, grupales y situacionales, no pudiendo ser tratada de forma lineal. Según éstos, para  poder considerar eficaz un estilo de liderazgo, se debe caracterizar la situación en la que el líder opera. La caracterización de esta situación es hecha por la elección de una variable estratégica en relación con la cual el modo o estilo de liderazgo va a ser definido.

 

Según J. Kotter, el liderazgo eficaz consiste en alcanzar una visión que tenga en cuenta los intereses a largo plazo implicados en esa actividad; en elaborar una estrategia racional que permita llegar muy cerca de esa visión; obtener el apoyo de los centros de poder en términos  de cooperación, benevolencia y el espíritu de equipo; y motivar continuamente a las personas que son parte determinante en la aplicación de tal estrategia.

 

Según lo que dice éste autor, el liderazgo no se comprende generalmente con “management”, aunque los dos son ciertamente incompatibles (realmente los dos son independientes en las funciones de dirección).  El “management” consiste esencialmente en un proceso de planificación de la organización y de control de ciertas actividades en las cuales se usa técnicas científicas de autoridad formal.

 

Como conclusión, decir que el liderazgo eficaz en las empresas, es hoy en día una necesidad muy importante y requerido en las grandes empresas debido a su complejidad. Se llama habitualmente el “espíritu de la empresa”. También puntualizar que un líder eficaz suele elaborar una visión y una estrategia teniendo en cuenta los intereses legítimos de otros individuos y también de otros grupos en el seno de la organización. Su eficacia reside en parte en este punto.

 

 

El papel del liderazgo efectivo en un entorno competitivo en calidad

 

El liderazgo efectivo se basa en el compromiso de la dirección con la gente para la mejora incesante de la calidad. Le corresponde al líder iniciar y comandar el proceso. Su papel es inspirar confianza y crear las condiciones para que las personas aprendan de la experiencia y consigan resultados cada vez mejores.

Así pues, podríamos llegar a pensar que en el liderazgo efectivo, la cultura de la calidad exige abandonar la antigua orientación a los resultados y sustituirla por el enfoque hacia el proceso. Hoy se acepta que la calidad se logra haciendo que todos trabajen para satisfacer las necesidades de los clientes y ello jamás se conseguirá con publicidad, metas o cuotas numéricas, sino seguramente a través de un liderazgo efectivo.

martes, 17 de junio de 2014

CÓMO DEBE COMPORTARSE UN LÍDER

El estilo de liderazgo se refiere al patrón de conducta de un líder, según como lo perciben los demás.  El estilo se desarrolla a partir de experiencias, educación y capacitación.

 Es importante que el líder descubra su estilo, lo conozca y comprenda, ya que afectará a los miembros del grupo o colaboradores. Y será su estilo de liderazgo el estímulo que mueva a cada uno ante diferentes circunstancias.

Cuando alguien adopta un papel de líder dentro de una organización, de su estilo depende cómo maneje sus habilidades, tanto técnicas,  humanas o conceptuales.

La habilidad técnica es la capacidad para poder utilizar en su favor o para el grupo, los recursos y relaciones necesarias para desarrollar tareas específicas y afrontar problemas. La habilidad humana es a través de la cual influye en las personas, a partir de la motivación y de una aplicación efectiva de la conducción del grupo para lograr determinados propósitos. El tercer elemento corresponde a la habilidad conceptual, aquella capacidad que se tiene para comprender la complejidad de la organización en su conjunto, y entender donde ajusta su influencia personal dentro de la organización.

Cada individuo en la práctica va perfeccionando, o deteriorando estas habilidades de acuerdo a su posición y resultados dentro de la organización a lo largo del tiempo. Poco a poco se va conformando su propio estilo de liderazgo.

Es importante comprender las necesidades de los seguidores, y a partir del grado de madurez de éstos, establecer el estilo apropiado. El líder deberá constantemente escuchar y comprender a sus colaboradores para poder determinar los estilos que deberá utilizar en las diferentes situaciones que se presenten. Debe tratar siempre de anticiparse a los hechos y no actuar cuando ya es demasiado tarde.

Más tarde o más temprano todos los líderes tratan de infundir o reforzar la confianza de sus seguidores.  En el fondo de una motivación bien sustentada, están la actitud positiva hacia el futuro, la confianza de lo que se puede lograr con el propio esfuerzo, y la conciencia de que nada es sencillo, y que nada es seguro para siempre.

Los líderes adoptan una personal y activa actitud hacia los objetivos y metas. La influencia del líder se ejerce en cambios de humor, evocando imágenes y expectativas, y estableciendo deseos específicos y propósitos que determinan la dirección y el enfoque hacia donde se quiere llegar.  El resultado neto del liderazgo, es lograr cambios en lo que la gente piensa acerca de lo que es deseable, posible y necesario.


Por otra parte, el éxito de los grandes líderes depende también de su habilidad para construir una base de seguidores leales y capaces. Nutrirse de un grupo efectivo, requiere dejar de pensar que el líder es el único que debe realizar el trabajo intelectual y que los seguidores sólo cumplen órdenes. La comunicación sincera, el esfuerzo conjunto y la corresponsabilidad, unidos al trabajo dificultoso, dinámico y comprometido proporciona las bases hacia el éxito del grupo.

jueves, 12 de junio de 2014

COMPONENTES DEL LIDERAZGO


Todo grupo de personas que dé el máximo rendimiento posible tiene al frente un líder. Consideraremos para definir el papel del líder cuatro factores fundamentales:
 
 §  Capacidad para usar el poder con eficacia y de un modo responsable.
 
 §  Capacidad para comprender que los seres humanos tienen diferentes elementos de motivación en distintos momentos y en situaciones distintas.
 
§  Capacidad para inspirar.
 
 §  Capacidad para actuar de forma tal que se desarrolle un ambiente que conduzca a responder a las motivaciones y fomentarlas.
 
El primer ingrediente del liderazgo es el poder, la naturaleza del poder y las diferencias entre poder y autoridad. El poder es la capacidad que tienen las personas o grupos de inducir o influir sobre las creencias o acciones en otras personas o grupos y por otro lado la autoridad es ajena al hecho personal es por tanto propia de la posición jerárquica que se ocupa dentro de la organización esta nos capacita para ejercer discrecionalidad al tomar decisiones que afectan a otros.
 
 
El segundo elemento es el entendimiento fundamental de las personas, saber aplicar esos conocimientos a las personas y las situaciones. Un líder que conozca los diferentes sistemas de motivación y que comprenda los elementos de la misma, es más consciente de la naturaleza y de la intensidad de las necesidades humanas y está en mejor posición para definir y diseñar formas de satisfacerlas.
 
 
Un tercer componente es la capacidad de inspirar a los seguidores para que apliquen todas sus aptitudes a un proyecto. Los dirigentes del grupo pueden ser interesantes y atractivos e inspirar lealtad, devoción y un intenso deseo por parte de los seguidores de lograr lo que quieren los líderes. Éste no es un asunto de satisfacción de las necesidades si no de una situación en que las personas dan un respaldo desinteresado al elegido.
 
 
El cuarto ingrediente del líder se relaciona con el estilo del líder y el ambiente que desarrolla. La intensidad de la motivación depende en gran parte de las expectativas, las recompensas percibidas, la cantidad de esfuerzo que se estima necesaria, la tarea a realizar y otros factores que son parte de un ambiente, así como de un clima organizacional.

viernes, 6 de junio de 2014

Marcos conceptuales para analizar las tareas de trabajo (1ª Parte)

Existen numerosas teorías sobre las  características propias de los puestos de trabajo que buscan identificar las cualidades del trabajo que subyacen en los puestos, de como estas características se combinan para formar diferentes puestos y la relación que existe entre éstas y la motivación, la satisfacción y el desempeño del empleado. Hay cuando multitud de teorías sobre las características propias de los puestos de trabajo.
Revisaremos aquí más importantes características de los puestos de trabajo: la teoría de los atributos necesarios para la tarea, el modelo de las características del puesto y el modelo de procesamiento social de la información.
Teoría de los atributos requeridos en el puesto de trabajo.
En diferentes estudios de investigación utilizados para evaluar el efecto de diferentes clases de puestos sobre la satisfacción y el absentismo del empleado. Pronosticaron que los empleados preferirán puestos que fueran complejos y que con llevasen un reto, tanto en lo personal como en lo profesional; tales características del puesto  incrementarían la satisfacción y darían como resultado tasas de ausencia menores, Definieron la complejidad de acuerdo con seis características de la tarea:
  • Variedad
  • Autonomía
  • Responsabilidad
  • Conocimiento y habilidad
  • Interacción social requerida
  • Interacción social opcional
Mientras más alto calificara un puesto en estas características, más complejo sería.
Los resultados confirmaron su pronóstico sobre el absentismo. Los empleados en tareas de alta complejidad tuvieron mejores registros de asistencia.
Cuando se tomaron en consideración las diferencias individuales relativas a antecedentes personales, de esta nueva variable se pudo concluir que los existían un grupo de trabajadores que tenían una variedad de intereses ajenos al propio desempeño laboral  y por tanto estaban menos involucrados y motivados por su trabajo.
El modelo de las características del puesto
La teoría de los atributos requeridos en la tarea de Turner sentó las bases de lo que hoy en día es el marco dominante para definir las características del puesto y entender su relación con la motivación, el desempeño y la satisfacción del empleado. Esto es el modelo de las características del puesto.
De acuerdo con El MCP (Modelo de Características del Puesto), cualquier puesto puede describirse desde el punto de vista de las cinco dimensiones críticas del puesto, definidas como sigue:
  1. Variedad de la tarea: El grado en el cual el puesto requiere una variedad de actividades diferentes para que así el trabajador ponga en práctica habilidades y talentos diferente
  2. Identidad de la tarea: El grado en el cual el puesto requiere de la terminación de la toda una porción identificable de trabajo.
  3. Importancia de la tarea: El grado en el cual el puesto tiene un impacto sustancial en la vida o el trabajo de otras personas.
  4. Autonomía: El grado en el cual el puesto proporciona libertad, independencia y discrecionalidad sustanciales para que el individuo programe el trabajo y determine los procedimientos que deberán ser utilizados para llevarlo a cabo.
  5. Retroalimentación: El grado en el cual el cumplimiento de las actividades requeridas por el puesto permiten que el individuo obtenga información clara y directa acerca de la afectividad de su desempeño. Brindan a sus poseedores un sentimiento de responsabilidad personal por los resultados.
Desde el punto de vista motivacional, el modelo dice que los individuos obtienen las recompensas internas cuando aprenden (conocimiento de los resultados) que ellos personalmente (responsabilidad experimentada). Cuanto más presentes estén estos tres estados psicológicos, mas grande será la motivación, el desempeño y la satisfacción de los empleados y más bajo su absentismo y la probabilidad de que abandonen la organización, los lazos entre las dimensiones del puesto y los resultados están moderados por la fuerza de la necesidad de crecimiento individual.
Las dimensiones críticas se combinan en un índice pronosticador único, llamado calificación del potencial motivador (CPM).
Los puestos que poseen alto potencial de motivación deben calificar alto en cuando menos uno de los tres factores que llevan a la plenitud experimentada y deben calificar alto tanto en autonomía como en retroalimentación. Si los puestos califican alto en potencial de motivación, El modelo predice que la motivación, el desempeño y la satisfacción se verán afectados positivamente, mientas que la posibilidad de ausencias y rotación disminuirán.
Todavía hay un considerable debate alrededor de las cinco dimensiones específicas en el MCP, las propiedades multiplicativas de la CPM y la validez de la fuerza de la necesidad de crecimiento como una variable moderadora.
Se puede hacer las siguientes afirmaciones con relativa seguridad:
  1. El personal que trabaja en puestos que califican alto en dimensiones centrales, está generalmente más motivada, se siente más satisfecha y es más productiva que la gente que no lo hace.
  2. Las dimensiones del puesto que operan a través de los estados para influir en las variables de resultados personales y en el trabajo, en lugar de influir directamente en ellas.
El modelo del proceso social de la información sostiene que los empleados adoptan actitudes y comportamientos en respuesta

 

Otra vez por aqui

De vuelta al Blog, después de un año muy atareado en lo personal y en lo profesional en la que no he podido dedicar tiempo al Blog hasta el punto de que parecía abandonado, ya estoy otra vez por aquí, con la intención de continuar la labor emprendida abandonada desde hace un año aproximadamente un año.
Un año de estudio e investigación y de recopilación que en breve empezaré a volcar de nuevo aquí, a compartir con todo aquel que quiera seguir profundizando, investigando y compartiendo en este maravilloso mundo que es el liderazgo y por ende la gestión de personas.