Estudiando la lista de las mejores empresas, empresas que aumentan cada año su productividad y beneficios
y que tienen menor índice de absentismo
laboral, descubrimos que entre las medida de gestión de personal empleadas
destacan aquellas que realizan una nueva gestión de sus horarios y que se basan
en la productividad e inteligencia del individuo, motivando su compromiso y las
iniciativas.
Horarios flexibles no quiere decir en ningún momento menor cantidad de
tiempo trabajado, sino que el propio trabajador administra su tiempo el mismo,
así mediante sistemas de control de presencia la empresa conoce el tiempo real
que el empleado ha estado en las instalaciones de la misma, valgan como ejemplo
los artículos de la empresa Cucorent (www.cucorent.com) sin someterle a horarios de entrada o salida.
Con este método, la exigencia hacia el trabajador es mucho mayor, la
empresa se asegura contar con el mejor
personal, y no con personal cuyo único valor son las horas de presencia física,
aunque su productividad real se haya
limitado a 5 minutos dentro en las 8 horas que han permanecido en las instalaciones.
Es como si la idea fuera que el salario es a cambio del tiempo del
trabajador en un horario determinado, y no por el resultado, y por tanto
productividad, que éste proporciona a la empresa.
Las innovaciones tecnológicas permiten incluso que los sistemas de control de presencia individualicen, de manera que sean las propias características
físicas de los empleados los que activen los mismos, evitando de esa manera la
tan conocida y argumentada por parte de muchos empresarios de “picaresca
laboral”, véase como ejemplo el link anterior.
La encuesta europea sobre condiciones
laborales, que Eurofund realiza
periódicamente a más de 40.000 trabajadores de 34 países (entre los cuales hay
los 27 Estados miembros de la UE),
sitúa a España como uno de los países con menos flexibilidad en la organización del tiempo de trabajo y con un
peor equilibrio entre la vida personal y profesional. Sistemas de control de
presencias que permitirían al empleado organizar su tiempo contribuirían
también a elevar la eficacia y la eficiencia por hora trabajada en nuestro país
y, posiblemente, ayudarían a reducir tanto el absentismo como el llamado
presentismo laboral (las horas de presencia en el puesto de trabajo sin
contrapartida en términos de dedicación efectiva).